Para superar esta crisis que estamos viviendo todos es de vital importancia mantener la calma y hacer uso de nuestra inteligencia emocional para tener la actitud mental positiva y controlar nuestras emociones que nos ayude a superar estos momentos difíciles.La crisis ocasionada por el COVID-19 que está impactando a más de 100 países ha trastornado la vida de todos. Para controlar la expansión de esta pandemia se ha ordenado el distanciamiento social y permanecer en casa.
En esta oportunidad debemos estar conscientes que no podemos cambiar lo inevitable y que la preocupación no nos ayuda en nada; por el contrario, puede afectar nuestra salud mental y bienestar.
Ahora es el momento de reaccionar y actuar de la mejor manera posible. Nuestra actitud es de extrema importancia por lo que debemos automotivarnos diariamente.
Cuando nos conectamos con los medios sociales, redes sociales o vemos los noticieros que trasmiten, en la mayoría de los casos, acerca de problemas, estos nos impactan en forma negativa. Si insistimos en ver este tipo de información estaremos propensos a sentir preocupación, ansiedad, miedo o estrés, lo que puede ocasionar problemas a nuestra salud mental.
Nosotros sabemos que afectamos y somos afectados, en el nivel subconsciente, por las personas con quienes tenemos relación a través de las palabras, pensamientos y sentimientos, así como con el comportamiento.
Es relativamente fácil pensar positivo cuando todo nos va bien, pero el real pensamiento positivo se revela cuando estamos en tiempos difíciles, como los de ahora, y es cuando más lo necesitamos.
En momentos de crisis cuando existen problemas, como los que estamos teniendo en estos momentos, es muy fácil tener pensamientos negativos, preocupaciones y entrar en el círculo vicioso de más problemas y preocupaciones.
La preocupación es una pérdida de energía ya que no se puede cambiar el pasado ni controlar el futuro, solo hace que nos sintamos mal en el presente.
Si pensamos que tenemos problemas, tendremos más problemas. Es precisamente, en ese momento, que debemos tener pensamientos positivos. Por eso, tan pronto como tengamos algún pensamiento negativo lo debemos rechazar y cambiarlo por pensamientos positivos.
Barbara Fredickson, profesora de psicología en la Universidad de Carolina del Norte, expresa que está científicamente comprobado que el pensamiento positivo es favorable para nuestra salud física y mental, así como en nuestras relaciones.
Mientras estemos en cuarentena o debamos permanecer en casa recordemos que el ejercicio físico y mental produce beneficios emocionales. El ejercicio es un excelente medio para combatir los negativos efectos de una situación crítica.
Aún durante estos momentos difíciles y de incertidumbre debemos ser agradecidos por lo que somos y por lo que tenemos. Debemos siempre valorar las bendiciones que hemos recibido.
Para mantener nuestra inteligencia emocional en estos tiempos de crisis debemos aceptar lo que no podemos cambiar, que es conveniente limitar nuestra exposición a los medios sociales y a las noticias y mantenernos conectados virtualmente con nuestra familia y amigos.
Los pensamientos positivos nos ayudan a enfocarnos en las posibles soluciones en lugar de enfocarnos en los problemas y dificultades. Nuestra actitud será de suma importancia, ahora más que nunca, para superar esta crisis.
Martin Seligman, profesor de psicología en la Universidad de Pensilvania, expresa acerca del pensamiento positivo: “Cuando se tienen pensamientos buenos las cosas saldrán bien. El optimismo es la sensación de pensar con esperanza que las cosas estarán bien”.
Con pensamientos positivos, esperando lo mejor, haciendo lo mejor y manteniendo una actitud positiva con fe, esperanza y optimismo, rehusando a la autocompasión, al pensamiento negativo y a la preocupación lograremos superar esta crisis.
