Con esperanza todo es posible. Con
esperanza podemos ver la luz al final del túnel. Con esperanza podemos ser
positivos, optimistas y encontrar la fuerza, el coraje y el convencimiento que
vamos a superar cualquier obstáculo, incluyendo esta crisis originada por el
Covid-19.
No cabe duda de que el año 2020 ha sido
muy extraño. Todos hemos sido impactados por esta pandemia.
Durante los primeros meses del Nuevo Año
debemos seguir las recomendaciones del Centro de control y prevención de
enfermedades de Estados Unidos: usar la mascarilla, practicar el
distanciamiento físico, evitar los sitios concurridos, lavarnos las manos
regularmente y en lo posible permanecer en casa, con la finalidad de
mantenernos sanos y saludables.
Es importante tener una dieta saludable,
beber más agua y hacer ejercicio físico. El caminar es la mejor medicina según
la Escuela de Medicina de Harvard.
Hay que limitar ver las noticias
que propalan los canales de TV, emisoras de radio y los medios sociales ya que
su contenido, en la mayoría de los casos, afectan nuestro estado de ánimo.
Con el inicio del 2021 hay que resaltar
la importancia de la esperanza. Cuando tenemos esperanza creemos que mañana
será mejor para nosotros, para nuestra familia, amigos y el mundo alrededor
nuestro.
Cuando hay esperanza tenemos fe. Cuando tenemos fe
en Dios, los milagros suceden. Es imperativo siempre tener esperanza porque hay
milagros todos los días.
Christopher Reeve expresó: “Cuando usted escoge
tener esperanza, todo es posible”.
Hellen Keller expresó: “La esperanza ve lo
invisible, siente lo intangible y logra lo imposible”.
Constantemente debemos recordar, especialmente durante estos tiempos
difíciles, que la esperanza es una fuerza poderosa que puede ayudarnos a
superar los desafíos impuestos por esta pandemia.
Hay algo maravilloso cuando tenemos esperanza, porque es más probable
que las cosas salgan como queremos.
Samuel Smiles, historiador y escritor escocés,
expresó: “La esperanza es la compañera del poder y la madre del éxito. Aquel
que tiene gran esperanza tiene dentro de sí el regalo de los milagros”.
Para
tener esperanza debemos siempre tener una actitud positiva. El camino hacia la
buena salud está pavimentado con una actitud positiva. Los pensamientos tienen
mucha fuerza. Una actitud positiva promueve determinación, persistencia y
resiliencia.
La
Clínica Mayo y la Escuela de Medicina de Harvard reportan numerosos beneficios
asociados al pensamiento positivo. Hay fuerza en el pensamiento positivo. Las
emociones positivas están asociadas a una mejor salud, a la longevidad y a un óptimo
bienestar.
Cuando una persona desarrolla el
hábito de tener una actitud optimista, disfruta más de la vida, tiene menos
estrés y cada día es bienvenido con un renovado entusiasmo. El optimismo también
nos ayuda a filtrar la constante andanada de noticias desalentadoras.
Es también importante practicar la
gratitud. Cada día debemos dedicar unos minutos para agradecer lo que somos y
tenemos. Debemos apreciar las cosas buenas de la vida como nuestra salud,
nuestra familia, amigos y la belleza de la naturaleza.
El
célebre emperador romano Marco Aurelio expresó: “Cuando te levantes en la
mañana piensa en el precioso privilegio de estar vivo, de respirar, de pensar,
de disfrutar, de amar”.
Durante este año 2021, El Año de
la Esperanza, con fe en Dios, esperanza, actitud positiva, optimismo y
gratitud encontraremos que cada día será mejor que el anterior.
¡Feliz Año 2021, el año de la
esperanza!