Una meta se define como algo que conscientemente queremos lograr, obtener, realizar. Con metas claramente definidas crearemos la oportunidad de vivir una vida extraordinaria haciendo uso de nuestro potencial. El establecimiento de metas es una herramienta clave y vital para lograr el éxito y la felicidad.
Hay una serie de estudios que demuestran que las personas que se fijan metas, que saben con precisión lo que quieren son las que tienen más éxito tanto en lo personal como en sus actividades profesionales.
La fijación de metas se debe aplicar a todas las áreas de la vida: personal, familiar, profesional, salud, deportes, social, espiritual. La única manera de obtener lo que se desea es mediante la fijación de metas.
Zig Ziglar, uno de los grandes motivadores recientemente fallecido, autor de numerosos libros de motivación, en su libro See You at the Top (Nos veremos en la cumbre) expresa: “Las personas con metas tienen éxito porque saben hacia dónde van… Es tan simple como esto”.
Paul J. Meyer, fundador de Success Motivation Institute, expresó: “la fijación de metas es la mayor fuerza humana para la automotivación”. El Dr. Alfred Adler, psiquiatra austriaco, autor del Conocimiento del Hombre, expresó: “La principal fuerza humana de la motivación es esforzarse por ser superior, que es lo que impulsa a la adaptación, la superación personal y a dominar los cambios de la vida”. Con metas definidas estaremos en mejores condiciones de hacer uso del gran potencial que Dios no ha dado.
La gran diferencia entre una persona de éxito y una que no lo tiene está en la fijación de metas. Abraham Maslow, en su libro Hombre autorrealizado: Hacia una psicología del ser, expresa que una característica común entre todas las personas de éxito es que tienen metas muy claras y definidas y al mismo tiempo un propósito en la vida.
Las personas que no establece sus metas o evaden establecerlas sencillamente deambularán por la vida sujeta a las circunstancias o a la influencia de factores externos; estarán constantemente a la deriva como si estuviesen en un velero en medio del mar sujeto a los vaivenes de las olas y del viento sin saber hacia dónde dirigirse.
Los estudios reflejan que entre las personas que tienen más éxito y que son felices tienen algunos rasgos comunes característicos como tener metas claras, un plan de acción definido, fe, esperanza, optimismo, confianza, autoestima, control de sus vidas, sólidas relaciones familiares, buenas relaciones de amigos, trabajo interesante, distracciones saludables, un propósito en la vida y gran entusiasmo.
A continuación indico algunas pautas generales para establecer metas. Las metas deben ser personales, tener valor, deben ser específicas, realistas, realizables y alcanzables.
Para empezar a fijar las metas es importante pensar en grande. Dar rienda suelta a la imaginación y creatividad. Pensar en todo momento que hemos sido creados a imagen y semejanza de Dios y que, por lo tanto, tenemos un enorme potencial por desarrollar. Los límites los ponemos nosotros mismos con nuestros pensamientos.
Hay que establecer metas a corto, mediano y largo plazo. Las metas que se vayan cumpliendo permitirán que se cumplan las que se han fijado lograr en un mayor plazo. La determinación de la fecha o el plazo máximo para cumplir una meta es muy importante. Es una manera de concentrar los esfuerzos para lograr lo que uno mismo se ha establecido en la fecha fijada.
Las metas deben estar escritas y en forma específica. En realidad, el primer gran paso es escribir las metas. Cuando las metas están escritas nuestro subconsciente las registra y pasan a convertirse de solo sueños a algo concreto y realizable. Asegúrese de definir qué es lo que quiere exactamente lograr. Nadie puede lograr algo si es que primero no define con exactitud qué es lo que quiere lograr.
Como no todas las metas se pueden cumplir al mismo tiempo hay que establecer una prioridad. Las más importantes deben estar en primer lugar en la lista.
Luego hay que establecer un plan de acción para realizar lo que se tiene que hacer para ir cumpliendo las metas en forma progresiva. En el plan es muy importante fijar fechas de cumplimiento. Día a día haga lo que sea necesario para acercarse cada vez más a su meta. Este accionar diario debe convertirse en un hábito. Periódicamente (cada semana) revise su plan para ver si se está cumpliendo o si se necesita efectuar algunas correcciones; todo esto sin cambiar su meta. Las metas se logran poco a poco.
En resumen, para lograr lo que usted desee en la vida debe tener metas claras y precisas para saber exactamente qué es lo que quiere lograr, debe escribirlas para que el subconsciente sepa qué es lo importante para usted y hacer un plan de acción con fechas límites de cumplimiento. Tenga fe, absoluta confianza en usted mismo y con optimismo, entusiasmo, voluntad, determinación y persistencia lleve a cabo su plan sin dejarse vencer por los obstáculos que seguramente encontrará o por lo que puedan decir o pensar otras personas. Al fijarse metas usted tendrá control sobre su vida. Usted puede si cree que puede y haga de este año 2013 el mejor de los vividos hasta este momento.
La fuerza de la fijación de metas es enorme y le dará la motivación interna necesaria para lograr todo lo que usted se proponga usando el potencial que Dios le ha dado para vivir la vida a plenitud, alcanzar el éxito y ser feliz.
