Nuestros hábitos son fundamentales en nuestra vida

En la edición del 5 de marzo de 2012 de la revista TIME hay dos artículos muy interesantes sobre nuestra fuerza de voluntad y nuestros hábitos, The Science of Willpower por Jeffrey Kuger y How Better Habits Can Make your Day por Annie Murphy Paul. Parecería después de estudios y análisis que, según los autores, todo depende de cómo funciona nuestro cerebro, de la armonía o confrontación de la creatividad del hemisferio derecho con el razonamiento lógico del hemisferio izquierdo.

La parte crucial es que nuestros pensamientos juegan un rol vital en nuestras vidas. James Allen, en su extraordinario libro As a Man Thinketh (Como un hombre piensa, así es su vida), en inglés publicado en 1902, expresa: “Una persona literalmente es lo que piensa; su carácter es la suma completa de todos sus pensamientos”.

Nosotros estamos donde estamos en estos momentos debido a todos nuestros pensamientos que hemos acumulado hasta ahora en nuestra mente. Con nuestros pensamientos, querámoslo o no, lo aceptemos o no, hemos creado la vida que vivimos actualmente. E inevitablemente son nuestros pensamientos lo que nos guiarán, para bien o para mal, durante toda nuestra jornada en este mundo.

Los únicos que tenemos control sobre nuestros pensamientos somos nosotros mismos. Nadie puede hacerle pensar algo que usted no quiere pensar.

Hay un poema corto de Napoleon Hill, considerado el Fundador de la Ciencia del Éxito, autor de numerosos libros sobre motivación, que pienso es conveniente tener presente.

Tendrás que pensar en alto para prosperar,
Y tendrás que estar seguro de ti antes
Que logres un premio ganar.
Las batallas de la vida no se ganan
Por el hombre más rápido o más fuerte, sino que
Más pronto o más tarde el hombre que gana, es aquel que piensa ganar.

Usted es y será lo que son sus pensamientos. La persona es lo que piensa que es. Hay que pensar en grande para ser grande. Una persona mediocre está hecha de pensamientos pequeños, de pensamientos mediocres. Si tenemos pensamientos de alegría, seremos y estaremos alegres. Si tenemos pensamientos de felicidad, seremos felices. Si tenemos pensamientos de temor, tendremos miedo. Si pensamos en el fracaso, seguramente fracasaremos. Si pensamos que vamos a triunfar, triunfaremos. Si pensamos en el éxito, tendremos éxito. Si elegimos correctamente nuestros pensamientos, seremos capaces de dar solución favorable a los problemas que enfrentemos. Marco Aurelio, filósofo y emperador romano, en sus Meditaciones, expresó: “Nuestras vidas son la obra de nuestros pensamientos”.

Para tener pensamientos positivos, de optimismo y esperanza debemos, conscientemente, formar el hábito de pensar positivamente. Si pensamos positivamente en forma constante formaremos el hábito de tener siempre pensamientos positivos. Los hábitos buenos debemos cultivarlos y debemos desechar los malos hábitos ya que los hábitos formarán nuestro carácter y nuestra manera de ser.

“Cuide sus pensamientos, porque se convierten en palabras. Cuide sus palabras, porque se convertirán en acciones. Cuide sus acciones, porque se convertirán en hábitos. Cuide sus hábitos porque formarán su carácter. Cuide su carácter porque se convertirá en su destino”.

“Nada hay más fuerte que el hábito” es una frase célebre del poeta latino Ovidio (43 a. C.). Y Aristóteles expresó: “Somos lo que hacemos repetidamente. La excelencia, por lo tanto, no es un acto, sino un hábito”. Nuestros hábitos son fundamentales en nuestra jornada en este mundo para vivir la vida a plenitud, lograr el éxito y la felicidad.